La mala hora
Novela , 1962
Literatura Random House
Páginas 224
Al alba de una mañana, mientras el padre Ángel se dispone a celebrar la misa, suena un disparo en el pueblo. Un comerciante de ganado, advertido por un pasquín pegado a la puerta de su casa de la infidelidad de su mujer, acaba de matar al presunto amante de ésta. Es uno más de los pasquines anónimos clavados en las puertas de las casas, que no son panfletos políticos, sino simples denuncias sobre la vida privada de los ciudadanos. Pero no revelan nada que no se supiera de antemano: son los viejos rumores que ahora se han hecho públicos; y a partir de ellos estalla la violencia subyacente a la luz tórrida, espesa, cansada y pegajosa, en una serie de escenas encadenadas de inolvidable belleza.
En La mala hora, Gabriel García Márquez construye un inolvidable apólogo sobre la violencia colectiva.